GERDA WEGENER

Gerda Wegener fue una pintora e ilustradora de moda danesa, recientemente más conocida por la película La chica danesa, un relato biográfico en el que se narra la transición de su marido, el también artista Einar Wegener, a mujer.

Nació el 15 de marzo de 1886 en Hammelev, Dinamarca, siendo la única hija que llegó a edad adulta del matrimonio formado por Justine y Emil Gottlieb. Su infancia transcurrió en provincias, en el seno de una familia conservadora, su padre era vicario en la iglesia católica y el arte, en el que destacó desde muy joven, se convirtió en una vía de escape.

A los 17 años se trasladó a Copenhague para inscribirse en la Real Academia de Bellas Artes, donde conoció al artista Einar Wegener, posteriormente Lili Elbe, con quien se casó en 1904, cuando ella contaba 18 y él 22 años.

Retrato de Ellen Von Khol (1908)
Poco después de graduarse en la academia, en 1907, Gerda se vio envuelta en una controversia cuando su obra Retrato de Ellen Von Khol fue rechazada en la exposición organizada por el diario danés Politiken, ya que la obra se convirtió en el centro de las disputas entre los partidarios del realismo y naturalismo, y los defensores del simbolismo. Este hecho, sin embargo, en lugar de repercutirle negativamente le reportó una mayor atención de la crítica y el público, y al año siguiente ganaría un concurso organizado por el mismo diario.

En 1912, tras varios años viajando por Italia y Francia, el matrimonio decidió instalarse en París, donde Gerda empezó a trabajar como ilustradora para varias revistas de moda, como Vogue o La Vie Parisienne, convirtiéndose en poco tiempo en una de las mejores ilustradoras de moda de su época.

Al mismo tiempo continuó con su carrera como pintora, realizando retratos y acercándose al mundo del erotismo y la sexualidad femenina, lo que la llevó a trabajar como pintora e ilustradora para varias publicaciones eróticas.

Una de las modelos preferidas de Gerda para sus retratos, era una joven de pelo corto, ojos almendrados y vestidos sofisticados y elegantes. Sorprendiendo a todos en 1913 cuando se descubrió que el modelo para estas obras había sido su marido.

Einar se había convertido en su modelo favorita cuando un día, en el que la modelo con la que trabajaba no pudo asistir a la sesión, Gerda lo vistió con una peluca y un vestido para poder acabar la obra. Para Einar este momento marcó el inicio de su transición a Lili, transición en la que siempre contaría con el apoyo de su mujer.

A partir de entonces Lili empezó a vivir abiertamente como mujer, y la pintura de Gerda tomó un camino mucho más sexual. Sus imágenes de mujeres desnudas y en poses sugerentes provocaban a menudo protestas debido a su tema abiertamente sexual, lo que le reportó gran popularidad.
Ilustraciones para La Vie Parisienne (1914)
En la década de los años treinta la vida de la artista sufrió varios reversos, tras el cambio de sexo de Lili su matrimonio fue anulado por el rey de Dinamarca y al año siguiente, en 1931, esta moría debido a las complicaciones de una de las muchas operaciones a las que se había sometido.

Retrato de Lili Elber (1928)
Gerda quedó devastada tras la muerte de Lili, pero poco después rehízo su vida casándose con el oficial italiano Fernando Porta, diez años menor que ella, con el que se trasladó a Marruecos. En este país intentó retomar su carrera pictórica, pero entre los problemas en su matrimonio y los problemas económicos derivados de la mala gestión de su marido decidió regresar a Dinamarca en 1938.

Expuso por última vez en 1939, ya sin apoyos y con un arte que había pasado de moda y perdido su popularidad e innovación. Completamente sola, comenzó a beber en exceso y a vivir de postales que pintaba a mano.

Murió en julio de 1940, recordada solo por una pequeña esquela en un diario local.